Quedan muy poquitos días para que llegue el 14 de febrero, una fecha muy romántica donde el amor se respira por todas partes. Y, aunque siempre es un buen día para celebrar el amor, ¿por qué precisamente el 14 de febrero es el día elegido? Si tienes curiosidad por saber más sobre San Valentín, origen y tradiciones de esta festividad, sigue leyendo porque, hoy, desde el blog de Duehome, te contamos todo sobre este día tan romántico.
¿Desde cuándo se celebra San Valentín?
Probablemente pensarás que San Valentín es una invención de este siglo y que tiene un origen comercial, pero la realidad es que se remonta al siglo III en la Antigua Roma. Se dice que el emperador Claudio II dictaminó la prohibición del matrimonio entre sus soldados, pues se pensaba que, de esta forma, serían más valiente y lucharían mejor en las batallas.
Pero, como se suele decir, el amor lo puede todo, incluso con las adversidades más difíciles. Fue gracias a un sacerdote llamado Valentín, que hizo posible que el reinara el amor casando a los jóvenes soldados en secreto. Cuando el emperador se enteró, capturó al sacerdote y lo sentenció a muerte un 14 de febrero del año 270. Desde entonces, esta fecha se ha celebrado para conmemorar a San Valentín, que hizo todo lo posible para que amor reinase, ante todo.
¿Cómo se celebra San Valentín en Europa?
El 14 de febrero, muchos países de Europa celebran la festividad del día de los enamorados, pero hay algunos que tienen sus particulares. Por ejemplo, en Finlandia y Estonia, este día es especialmente importante para celebrar el amor, en el sentido amistoso. Y también suele ser un día muy especial en el que es frecuente que realicen propuestas de matrimonio.
Por otra parte, en Dinamarca y en Noruega, tienen como tradición en este día, regalarse pequeños poemas a los que llaman ‘Gaekkebrev‘ caracterizados por tener divertidas rimas que los hombres suelen enviar a las mujeres de manera anónima. Como dato curioso, en el remitente, se colocan unos puntos que corresponden con las letras del nombre del enamorado. Si la chica acierta el nombre de su enamorado, cuando llegue Pascua, este le regalará un huevo de chocolate a ella, pero, si se equivoca, será ella quien tenga que regalarle un huevo de Pascua a él.
Otra tradición curiosa la encontramos en Alemania, dónde lo típico es regalar cerditos el día de los enamorados. Para ellos, los cerdos simbolizan suerte en el amor e, incluso, dependiendo de la postura, también pueden significar lujuria. Por suerte, no es necesario regalar cerdos de verdad, a veces son figuras, dibujos o peluches con forma de cerditos.
San Valentín fuera de Europa
Se dice que el amor no conoce fronteras y, es que, San Valentín se celebra en todos los rincones del mundo. ¿Quieres conocer tradiciones particulares? Sigue leyendo porque te vamos a contar algunas que seguro no conocías.
En Taiwán es tradición regalar rosas rojas, algo que puede resultarte muy común, pero ellos tienen la particularidad de que, según el número de rosas, el resultado puede cambiar. Por ejemplo, una rosa significa que “eres mi único amor”, noventa y nueve significan que “lo nuestro es para siempre” y ciento ocho rosas son una pedida de matrimonio en toda regla, porque literalmente significan un “¿quieres casarte conmigo?”.
En Japón, la tradición es que sean ellas quienes hagan regalos a los chicos, concretamente bombones de chocolate. Y no solo a sus parejas o enamorados, también tradición que se los regalen a amigos chicos o, incluso, a compañeros de trabajo.
Si nos vamos al otro lado del mundo, concretamente en América Latina, también encontramos que el día de los enamorados se celebra el 14 de febrero. En Perú, por ejemplo, es tradición regalar bombones hechos expresamente para la ocasión acompañados de una orquídea y una poesía. En Cuba, es común vestirse de rojo ese día y no es de extrañar que se encuentren buzones especiales para recibir las cartas de tus enamorados.
Ideas de regalos para San Valentín
España también tiene sus propias tradiciones para San Valentín, pero un regalo único y hecho con amor no puede faltar. Y, aunque pienses que las rosas o las joyas son la mejor opción, también hay otras cosas que pueden ser mucho mejores.
Por ejemplo, puedes regalarle algo para vuestra futura casa juntos, que también denota un compromiso de querer compartir un futuro con esa persona. Ya sea un bonito espejo joyero, un tocador o un sofá donde podáis sentaros y compartir tiempo viendo una película.
No hace falta complicarse mucho para elegir el regalo perfecto y, como ya has visto, descubrir San Valentín, origen y tradiciones de todo el mundo, nos sirve para darnos cuenta de que el amor puede expresarse de mil maneras diferentes.