Hace unos meses comenzamos una serie llamada «inspiración de color» en la que se recalcaba la importancia de los colores en la creación de un ambiente. Si entonces os hablamos del verde bosque, hoy continuamos la temática con la variante pastel de este tono. Decorar con verde mint es la opción perfecta para esta época del año, pues la primavera pide a gritos tonos pasteles y mucha luz, ¡cómo negarnos! Por eso, para el post de hoy hemos seleccionado una serie de ambientes con el verde mint como protagonista, para una decoración fresca y muy original.
Una de las opciones más utilizadas a la hora de decorar con verde mint es la de pintar una pared individual de este color, acompañándola de rodapiés, paredes y marcos blancos y de una decoración muy neutra. Esta elección de paredes bicromáticas crea un efecto muy relajado y fresco, aportando luminosidad y un toque de color a la habitación. Si esta idea no te convence, siempre puedes pintar una parte de la pared de verde pastel como vemos en la primera imagen, ayudando a generar espacios que antes no existían.
La cocina es uno de los espacios que mejor acepta este primaveral color. Decorar con verde mint en combinación con madera es una de las opciones más escogidas, pues crea una sensación de limpieza, frescor y armonía. ¡Es un placer comer en una cocina mint, hasta parece que los alimentos son más frescos! Además, si no quieres invertir en superficies, siempre puedes introducir este tono con los complementos, como sillas o taburetes de aluminio y utensilios de cocina colocados a la vista.
Y hablando de cocinas, las neveras en color mint son una de nuestras formas favoritas de incluir este color en casa, aunque no tiene por qué ser necesariamente en la cocina. El modelo típico de frigorífico en mint tiene un aspecto muy retro y vintage, por lo que la ventaja es doble: te ayuda a decorar con verde mint y da un toque de personalidad y originalidad a tu casa, ¡más todavía si la colocas en el salón!
El baño es otro de los entornos donde el verde mint tiene más efecto, pues su efecto relajante y luminoso casa a la perfección con la cerámica de esta habitación. Ya sea en la variante más romántica con suelos de madera y bañera de patas o en la opción más retro y campestre con muebles envejecidos, el color mint nació también para dar color a los baños.
Si te preocupa arriesgar con este color, prueba a añadir pequeños toques del mismo con muebles en tonos pastel. Ya sean armarios pulidos y limados para crear un aspecto vintage o con vitrinas modulares, decorar con color mint pequeños rincones de tu casa le dará un toque muy primaveral, sobre todo si lo combinas con plantas y flores.
Si estás pensando en utilizar este color para dar un cambio de imagen a tu dormitorio, decorar con verde mint puede ser tu mejor opción. Combínalo con tonos blancos y grises para crear un efecto luminoso y de calma.
Y para terminar, aunque de entrada el color mint te resulte demasiado claro y femenino, no tienes por qué renunciar a él. Prueba a mezclarlo con colores más bold y oscuros como el gris marengo o el negro. De esta forma conseguirás un resultado potente y muy nórdico con pequeñas pinceladas de mint para dar luz y color a la habitación.
¿Te animarás a decorar con verde mint esta primavera?
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Foto de cabecera| Una pizca de hogar.
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